Manejo, Prevención, Sara Crespo Vicente
El Raboteo en el sector porcino español. La otra cara de la moneda
La técnica que se basa en el corte sistemático de la cola de los lechones es conocida como raboteo. Actualmente en España, si se practica esta técnica debe realizarse de forma parcial según el Real Decreto 159/2023, de 7 de marzo del 2023 siguiendo la normativa europea. La longitud de cola residual debe, como mínimo, cubrir la vulva en las hembras y el esfínter anal en los machos.
El raboteo, no está prohibido en Europa todavía, excepto en Suecia y Finlandia. Sin embargo, es obligatorio evitar que sea una práctica rutinaria en la granja. Únicamente se permite su uso cuando se disponga de una comunicación del resultado de los controles realizados en matadero según lo dispuesto en el artículo 4.4, perteneciente al Real Decreto 159/2023, de 7 de marzo del 2023, o existan pruebas documentales con el contenido mínimo de que se han producido lesiones de las tetillas de las cerdas o las orejas o rabos de otros cerdos en el año anterior a la propuesta de raboteo realizada por el veterinario de la granja ( los documentos se encuentran en el enlace de bibliografía del MAPA).
Solamente un veterinario o una persona formada, tal como se contempla en el artículo 5 de este real decreto, con experiencia en la ejecución de las técnicas aplicadas, podrá realizar con los medios adecuados y en condiciones higiénicas el raboteo. Generalmente se realiza las primeras 24-48 horas de vida mediante un instrumental especifico y cauterizador para evitar sangrado y con analgesia. En caso de que el raboteo se realice a partir del séptimo día de vida se llevarán a cabo únicamente mediante una anestesia y una analgesia prolongada practicada por personal veterinario.
Análisis de factores de riesgo de la Caudofagia
Para disminuir el problema de la caudofagia se recomienda a las explotaciones ganaderas llevar a cabo un seguimiento de los factores de riesgo y registrar los datos relativos a los seis aspectos clave, así como observar atentamente el comportamiento de los cerdos. De esta forma se intentará reconocer cualquier deficiencia antes de que aparezca la caudofagia y se convierta en un problema.
Entre los principales factores de riesgo a estudiar encontramos:
1. Materiales de enriquecimiento ambiental: los cerdos tienen la necesidad de explorar y rebuscar el entorno para encontrar comida (hozar, morder y masticar). Para ello es importante poner un material que pueda ser manipulable como la madera. Se colocan en zonas fácilmente accesibles a fin de mantener viva la atención de los cerdos.
Imagen 1: Aplicación de paja y heno como material manipulable. Fuente: Comisión europea.
Imagen 2a y 2b: Cadena con plástico como material manipulable. Diferentes juguetes como material manipulable para evitar caudofagia. Fuente internet.
Existen materiales de enriquecimiento compatibles con los sistemas de manejo de estiércol y suelo emparrillado, como paja larga troceada, alfalfa y cuerdas de cáñamo (Imagen 2a). Para los cerdos, es importante poder cambiar la localización del material, así como su apariencia y estructura. Debe de ser masticable o comestible (Imagen 2b); a los cerdos les gusta rebuscar y hozar el material. Se pueden proporcionar uno o varios tipos de material.
Imagen 3: Diferenciación entre materiales óptimos, subóptimos y marginales. Fuente: MAPA
Se recomienda añadir más material en los recintos con mayor riesgo.
2. Comodidad térmica y calidad del aire y la luz: los cerdos necesitan vivir en un entorno estable que reúna condiciones cercanas a su temperatura y humedad óptimas, donde no haya corrientes de aire y la calidad de la luz sea la adecuada. Una temperatura y calidad del aire adecuadas son factores extremadamente importantes para reducir el estrés de los cerdos (Grafica 1). La solución óptima es disponer de zonas con diferentes temperaturas.
Grafica 1: El estrés térmico como principal factor de aumento de la caudofagia. Fuente: internet
Imagen 4: Iluminación y control ambiental de las instalaciones. Fuente: propia.
3. Alimentación: es necesaria una adecuada composición del pienso, así como el aporte de minerales fibra y aminoácidos esenciales para evitar problemas de nerviosismo y alteración del bienestar que puedan desencadenar a estrés.
4. Distribución y limpieza de los recintos: los cerdos prefieren dividir el espacio del recinto en zonas que dedican a distintas actividades (descansar, comer y defecar). Por lo tanto, un entorno sucio reduce la comodidad del animal y aumenta su estrés. Debemos trabajar bajo el concepto de “todo dentro-todo fuera”. Con instalaciones limpias a la entrada de nuevos animales y con un periodo de descanso de al menos 4-5 días entre la introducción de un nuevo lote y salida del anterior (Imagen 6).
Imagen 5: Limpieza y desinfección de las salas mediante productos específicos. Fuente: propia
5. Salud y bienestar: los animales que sufren algún proceso clínico tienen mayor tendencia a estresarse. Para mantener la salud de los cerdos y evitar brotes de enfermedades en la granja, son importantes un buen plan de salud para la piara y revisiones veterinarias periódicas. Una de las mejores formas de evitar la caudofagia es mantener un buen estado general de salud (Imagen 7), lo cual, indudablemente, también es beneficioso para el negocio ganadero.
Imagen 6: Bienestar animal. Cerdos recién destetados. Fuente: internet
6. Rivalidad: la jerarquía de los animales puede producir mayor estrés. Pero ¿qué pasaría si aun realizando el control sobre todos estos puntos seguimos teniendo problemas de caudofagia en nuestras granjas?
¿Qué pasa con todas esas pruebas que se realizan para dejar de rabotear a los animales y no terminan de salir como esperamos?
Situacion actual
Debido a la gran presión a la que se ve sometido el sector porcino en el ámbito del raboteo, se han ido tomando una serie de medidas que han sido adoptadas en la mayoría de las granjas españolas.
Podríamos decir con certeza que se está trabajando en la reducción de superficie de la zona raboteada a alrededor de un centímetro, donde solo se corta el extremo que queda anatómicamente formando una espiral en la cola del cerdo (Imagen 7).
7a) Lechona con el rabo sin cortar. 7b) Lechona con el rabo cortado según legislacion. 7c) Lechona con el rabo cortado solo el extremo de 1,2 centimetros para reduccion de raboteo. Fuente: propia.
Tras la realizacion de varias pruebas en condiciones comerciales observando la etiologia de los animales , se ha podido identificar que la parte distal que realiza la curva en forma de espiral, cuando el animal realiza el movimiento de la cola esta atrae al resto de los lechones haciendo que sufran un interes por succionar , chupar o morder este extremo, llegando a una situacion de caudofagia severa que implica atención veterinaria inmediata.
Número de animales |
Raboteo |
Animales afectados |
Sacrificados |
Problemas locomotores |
50 |
No |
23% |
14% |
0.8% |
50 |
Según legislación |
1.2% |
0.25 % |
0.12 % |
50 |
Solo el extremo 1-1,2 cc |
1.7 % |
0.3 % |
0.16 % |
Cuadro 1: Prueba comparativa entre animales sin raboteo, raboteo según legislacion y solo el extremo de la cola 1-1,2 cc de corte. Fuente: propia
Aunque el numero de animales orientados a prueba no es elevado, podemos afirmar que un 23 % de casos de mordedura de colas ( con diferente severidad) ocurre en los animales en los que no se ha realizado el raboteo, donde alrededor de un un 14 % han tenido que ser sacrificados en alguna de las fases y casi alrededor de otro 0,8 % han fallecido por problemas locomotores asociados a infecciones caudales dañando el sistema nervioso periferico a nivel del plexo lumbosacro.
Imagen 8: 8.a) Sistema nervioso periférico señalando la región del plexo lumbosacro. 8.b) Animal afectado por caudofagia. Fuente Internet y propia.
Hablando de las transiciones y engordes, según la normativa vigente, no deberán introducirse en las explotaciones animales raboteados a menos que:
a) Se disponga de pruebas documentales con el contenido mínimo que se indica que se han producido lesiones en las orejas o rabos de otros cerdos, o se disponga de una comunicación del resultado de los controles realizados en matadero.
b) Se disponga de pruebas documentales con el contenido mínimo de que se han modificado en consonancia las condiciones ambientales o los sistemas de gestión.
c) Se haya solicitado expresamente a la explotación de origen de los lechones, cuando ésta sea nacional.
Por ello, y por petición de las granjas de destino, sitio 2 (transiciones), o sitio 3 (engordes) se solicita en casi el 99% de los casos llevar a cabo el raboteo con justificación documental asociada en las granjas de madres, continuando la realización de pruebas con animales piloto para intentar reducir el número de granjas que llevan a cabo el raboteo.
De este modo, y en la otra cara de la moneda, en el sector porcino español está trabajando en gran medida en la consecución de la no realización del raboteo según el concepto de bienestar animal, sin embargo, tanto veterinarios como ganaderos de “a pie de campo” nos preguntamos: ¿Realmente con los resultados insatisfactorios obtenidos hasta ahora en las diferentes pruebas realizadas de animales no raboteados este proceso está ligado al bienestar animal? De lo que si estamos seguros es que, una clínica de caudofagia es dolorosa, crónica e implica una elevada mortalidad asociada. Aun así, como en todo, el sector seguirá trabajando para que en un futuro podamos conseguir este objetivo que tanto se ansía.
Imagen 9: Animales de engorde afectados por un proceso de caudofagia severa. Fuente: internet
Bibliografía
https://agriculturaganaderia.jcyl.es/web/es/ganaderia/estrategia-prevencion-caudofagia.html
https://porcinews.com/evitar-la-caudofagia-sin-recurrir-al-raboteo/
https://food.ec.europa.eu/system/files/2019-05/aw_practice_farm_pigs_tail-docking_esp.pdf
https://www.ivis.org/sites/default/files/library/suis/175/Suis175_2.pdf